Evelyn comenzó de niña a tocar el piano y luego siguió con un clarinete. Con 12 se inició en la percusión.  Evelyn no es totalmente sorda, tiene un deterioro muy avanzado de su escucha y apenas percibe sonido alguno. Sin embargo, aprendió a percibir y clasificar las vibraciones.
"La sordera no quiere decir que no podés escuchar, sino que algo en tus oídos funciona mal. Incluso alguien totalmente sordo puede escuchar/sentir sonidos", escribe en su Ensayo sobre la audición. Puede leer los labios a la perfección y, puede defenderse a la hora de hablar.